Normalmente hay que anudar el chal unas 3 veces antes de entender realmente cómo funciona. Intenta atarlo primero con un muñeco o un osito de peluche para aprender la técnica antes de ponérselo a tu hijo. Si es posible, inténtalo la primera vez con tu hijo cuando esté lleno, satisfecho y con el pañal recién cambiado. Después, una vez que tanto usted como su bebé se sientan cómodos en el fular portabebés, ponérselo suele ser una de las mejores formas de calmar a un bebé triste y ansioso.
Después de poner al bebé en el fular por primera vez, camina un rato hasta que se haya calmado. Si tu bebé empieza a quejarse cuando lo pones en el fular con mamá, pero se calla cuando lo pones en el fular con papá, esto indica que el bebé tiene hambre y se siente provocado por el olor a leche de mamá. En este caso, la madre puede utilizar un chupete o, mejor aún, amamantar al bebé en el fular. O el papá puede llevar al bebé un rato en brazos.
Si tiene problemas para hacer bien los nudos después de intentarlo varias veces, póngase en contacto con su distribuidor y pídale ayuda.
A muchos recién nacidos les gusta sentarse erguidos, pero con los brazos y la cabeza completamente dentro del chal. A los bebés un poco más mayores, que pueden mantener la cabeza firme, también les gusta sentarse erguidos, pero con la cabeza y los brazos fuera del chal para poder mirar a su alrededor.
Si pones a un bebé recién nacido en posición vertical en el fular, debes prestar atención a su aspecto. Si el bebé se desploma, se tumba sobre un lado y la espalda parece torcida, debes utilizar en su lugar un fular cuna, en el que el bebé se tumba o se semisienta. Los recién nacidos con la espalda un poco más débil pueden tardar unas semanas en estar en condiciones de sentarse erguidos en un fular.
Los recién nacidos y los niños pequeños se llevan mejor en una mochila porta bebé sentados boca abajo, bajo su propia chaqueta. Así tienen un buen acceso de aire. Cuando llevas a tu recién nacido debajo de tu chaqueta, no tienes que preocuparte de si tiene demasiado frío o demasiado calor. Puedes sentir directamente la temperatura del bebé, ya que lo llevas barriga con barriga. Esto también significa que estás ayudando a mantener a tu bebé a la temperatura adecuada con tu cuerpo.
Lo único que hay que ponerle al niño antes de salir es un par de patucos calientes o zapatos cortavientos, un polo falso y un gorro. Por lo demás, basta con la ropa que el niño lleva normalmente dentro de casa, ya que primero se añade el fular como capa extra y luego la chaqueta encima. Si tu hijo suda con facilidad, suele ser buena idea vestirle con ropa suave de lana merina. La ropa de lana absorbe muy bien la humedad y, aunque se humedezca, no se enfría y mantiene al niño caliente y seco.
Ponte una chaqueta normal pero amplia que puedas abrochar alrededor de ti y del bebé. Si la madre ha tenido una chaqueta de invierno mientras estaba muy embarazada, suele ser más que suficiente para que quepa el bebé en un portabebés debajo.
Si no tienes una chaqueta lo suficientemente grande, puedes comprar una "chaqueta de porteo" especial o una funda de porteo, que cubre el hueco cuando no puedes cerrar la chaqueta sobre el niño.
En verano, cuando hace calor, se necesita un chal fresco. Aldoria Bambu Soft es perfecto para la estación cálida, ya que el tejido de bambú absorbe eficazmente el calor y la humedad. El chal se siente seco y fresco aunque haga calor en el exterior. Varios clientes lo han utilizado durante la estación más calurosa en España, Tailandia y Australia y han quedado muy satisfechos con él. Si pasa mucho tiempo al aire libre y al sol, necesita protegerlo del viento y del sol directo. Es buena idea llevar un sombrero de ala larga en la nuca para protegerle de las quemaduras solares. También existen protectores especiales para el verano que protegen a los niños del viento, el sol y los insectos. Son de tela fina, se atan sobre el chal y bajan hasta cubrir también las piernas. También se puede subir parcialmente por encima de la cabeza para proteger al niño de la respiración en caso de viento fuerte. Para los recién nacidos muy pequeños, no se recomienda exponerlos innecesariamente a la luz directa del sol, sino intentar mantenerlos a la sombra en la medida de lo posible.
Cuando tienes un hermano, puede ser muy útil llevar al pequeño en un portabebés mientras sigues teniendo las manos libres para cuidar del mayor. No pasa nada por coger al mayor, ayudarle a comer en la mesa, jugar en el parque, ir de compras y cogerle de la mano o llevarlo en un sulky mientras llevas el portabebés en la barriga o la espalda. A muchas personas les resulta especialmente útil llevar a su pequeño en un portabebés sobre el estómago cuando van a recoger a su hermano mayor a la guardería.
Con un poco de práctica, también puedes dar el pecho a tu bebé llevando un portabebés. Es más estable dar el pecho en un fular tejido, pero también funciona bien en un fular de punto. Si estás de pie y caminas mucho y quieres dar el pecho al mismo tiempo, te recomendamos Aldoria Eco Wrap. Si quiere poder dar el pecho un poco para uso doméstico mientras está de pie, caminando o sentada (por ejemplo, viajando en tren), Aldoria Bambu Soft también funciona bien. Si desea amamantar principalmente sentada, lo mejor es Aldoria Eco Ring.
Una mochila porta bebé ocupa muy poco espacio cuando está plegada y es fácil de llevar en el coche, por ejemplo, si te vas de viaje. No tienes que cargar con todos los cochecitos para subir y bajar del coche y las escaleras hasta tu piso. Si viajas en autobús o tren, visitas un museo, vas a la ciudad o al campo, podrás llegar sin problemas. Tampoco ocuparás mucho espacio si vas de compras.
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