
La reunión con África
Incluso hoy, 30 años después, recuerdo lo que sentí al bajar del avión y enfrentarme a África por primera vez. Tenía 14 años y nunca había viajado al extranjero. Aún recuerdo el olor a polvo y el cálido viento africano que me azotó. Abajo, varios africanos nos sonreían, nos daban la mano y nos daban la bienvenida. Un primer encuentro con un continente que me abrió el mundo. En ese momento me di cuenta de que quería hacer algo para cambiar el mundo, pero entonces no sabía cómo.
Pasión por la protección del medio ambiente
Mediados de los 90
La pasión por la gestión medioambiental me llevó a estudiar química, biología e ingeniería medioambiental. Pero el destino quiso que acabara en la industria farmacéutica, donde trabajé varios años. Fue una época instructiva, aunque no me sintiera del todo a gusto.
Mamá por primera vez
Unos 10 años después...
Pero entonces, una hermosa mañana de octubre de 2008, me convertí en madre de una niña increíble, a la que, por supuesto, quería dar el mejor comienzo en la vida. Entonces volví a pensar en lo que había vivido una vez y en poder proporcionar seguridad cerca de mi hija. En 2008, no era fácil hacerse con un fular portabebés, las tiendas en línea eran escasas y las grandes tiendas de bebés que existían aún no tenían ese tipo de producto en su surtido. Esto me hizo pensar en reunir yo misma buenos productos para niños, todos ecológicos y no tóxicos en un solo lugar.

En 2009 nació Aldoria
Este fue el comienzo de una tienda online con una gama ecológica para niños y a través de esa tienda se inventó Aldoria Baby. Aldoria Baby empezó con el fular portabebés Aldoria Bambu Soft y poco a poco se han ido añadiendo nuevos productos. Hoy en día, Aldoria Baby es una marca muy conocida con varios minoristas en Suecia en varios países de la región nórdica y Europa.
